• “Cowboy Carter” es una reivindicación a una experiencia donde la cantante no se sintió bienvenida
  • Es un álbum de Beyoncé
  • El material contiene 27 tracks, entre ellos, colaboraciones con reconocidos artistas.

La cantante y productora Beyoncé Knowles lanzó el pasado 29 de marzo “Cowboy Carter”, su octavo disco de estudio, una propuesta musical country que de acuerdo con la artista retoma sus raíces como tejana. 

El disco cuenta con 27 canciones, que dan cuenta de una reivindicación por parte de la cantante, quien señaló en Instagram  “Este no es un álbum country. Este es un álbum de Beyoncé”.

Knowles señaló que este álbum también surge después de que en 2016 durante una entrega de Premios Country, no se sintió “bienvenida”. A partir de ello, estudió archivos musicales e historia, reiterando que, además, la música puede unir a mucha gente alrededor del mundo.

El country es un género musical, surgido en Estados Unidos durante 1920, con raíces en las comunidades rurales; sin embargo, actualmente con escasos referentes afroamericanos, por lo que la incursión de Beyoncé en el género, supone un hito para esta comunidad y las mujeres.

De acuerdo con declaraciones de la cantante, este disco tardó cinco años en hacerse y para ella es un honor ser la primera mujer negra en encabezar las listas musicales como  “Hot Country Songs”, también es una forma de dejar de lado la raza de un artista como referente musical, a lo que la cantante expresó:

“Mi esperanza es que dentro de unos años la mención de la raza de un artista, en lo que se refiere a la liberación de géneros musicales, sea irrelevante”.

Beyoncé también destacó las colaboraciones de este disco, tales como Miley Cyrus y Dolly Parton y reiteró que es una continuación de su material anterior “RENAISSANCE”.

 

Actualmente, “Cowboy Carter” es uno de los discos más escuchados en las listas musicales de Estados Unidos y el mundo, posicionándose en las plataformas digitales.

La cantante, además de ser un referente musical de nuestra época, ha alzado la voz distintas ocasiones ante el racismo que atraviesa sistémicamente la industria musical. 

Al referirse a este último material, la cantante puntualizó la necesidad de también abrir espacios a las mujeres, sobre todo, afroamericanas.

 

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